SATISFACCIÓN COMO FUENTE DE INGRESOS.
LA
FRONTERA LUIS ARMANDO VARGAS TORRES.
A lo largo de mi vida me he
encontrado personas que critican acremente su destino, se encuentran en
desacuerdo del como ellos se prepararon arduamente para encontrar el éxito
familiar, laboral y social. Sin embargo sus ingresos son exiguos no
corresponden a su saber, sus familias sufren limitaciones y su enlace con la
sociedad no es placentero.
Hay de pronto historias de
algunos personajes que con poco grado de preparación intelectual se encuentran
en la cima de los millonarios mundiales, hablo de jugadores de futbol soccer y
americano, beisbolistas, tenistas, boxeadores, cantantes, etc.
Por decir algo encontramos a un
David Beckam que a sus 35 años de edad y a pesar de estar fuera de luminarias
gana 40 mdd. al año. En segundo lugar está Ronaldo el del Barcelona con 35 MDD,
le sigue Kaká con 25 mdd, luego Ronaldinho el del Pachuca, Thierry Henry y
Messi.
Pasando al Rey de los Deportes
encontramos al beisbolista de los
Yankees de NY Alex Rodríguez, que cuenta con un contrato de 356 mdd por 6
temporadas, el boxeador Floyd Mayweater Jr. Con ingresos anuales de 73.5 mdd, cantantes que ganan lo que quieren y actores
de 25 mdd por película.
Así podríamos acabarnos este
espacio con clubes multimillonarios como el Real Madrid, Manchester United,
Barcelona y aquí en México los millonetas del América o los Tigres con nóminas
abultadas, organizaciones fastuosas como la FIFA, CMB,FIB, AMB, NBA, de
Hollywood etc.
Es importante saber que los
patrocinios de marcas deportivas forman parte del paquete integral de los
ingresos que se llevan las luminarias o los clubes exitosos, el manejo del
marketing y sobre todo mediático, dirigido hacia los amantes de estos deportes
o artistas
La clave está en que estos héroes
deportivos, artistas e industria del entretenimiento fortalecidas con las
marcas deportivas traen felicidad y satisfacción a sus seguidores, muchos de
ellos fanáticos, que están al pendiente de sus ídolos y pagarían lo que sea por
verlos actuar.
Por ejemplo es digno de admirar
el sistema de tele marketing del cantante Luis Miguel, te envía con 6 meses de
anticipación el plano del teatro, costos por palco y te informa cuantos boletos
quedan, hay grupos musicales como One Direction que programan giras con 1 año
de antelación. La gente lo paga se
endeuda sin chistar, de ahí sus ingresos altos.
¿Entonces, es la capacidad de
otorgar felicidad lo que hace esas profesiones bien pagadas? Está demostrado
que el ser humano cuando recibe un bienestar está más que dispuesto a pagar y a
realizar los sacrificios necesarios para sentirse bien, olvidándose de las
previsiones, raciocinios y convencionalismos.
Ello lo observamos en los fans
que no les importa quedar sin inscribirse con tal de ver a su ídolo, pasa lo
mismo con el adicto que pierde todo por
momentos de satisfacción, los amantes que destruyen sus familias y
haberes por la locura frenética de la posesión, del que paga por sexo, o el que
se abandona al alcohol por el puro gozo báquico de estar entre la tierra y el
cielo.
Para concluir, la contraparte de
esto es que si en tu trabajo formas
parte de un engranaje de producción o de un área gubernamental sin mando, nunca
podrás aspirar a escalar la pirámide social por tus ingresos, a menos que te
conviertas en delincuente o le entres al esquema del entretenimiento ya
mencionado. Siendo algo especial, vendible y que congregues masas.
Hasta los años setentas obtener una profesión era sinónimo de buenos ingresos,
buenas esposas, aprecio y respeto, el día de hoy eso se ha perdido, se sigue
agrediendo el saber, el intento de degradación de las carreras del Politécnico
y de la carrera de enfermería para convertirla en una profesión artesanal indica
que algo anda mal en la Secretaría de Educación. Buen provecho.
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