¿A quién contrataría?

En un escenario hipotético, entrando en el terreno de los supuestos, si usted amable lector me lo permite, imaginémonos que  es propietario de un buen y rentable negocio o empresa, que le costó la vida entera levantarlo y darle un nombre y prestigio, asi mismo tiene usted una serie de propiedades y bienes producto de años de esfuerzo y trabajo que le significan la seguridad económica y el bienestar de su hermosa familia. 

Pues asumamos que por alguna razón de peso, ya sea por inseguridad, por retiro o vejez, enfermedad o incapacidad de algún tipo usted no puede seguir al frente de su amada empresa y tiene que designar a un gerente , con todos los poderes generales para representarlo legal y ampliamente en juicios laborales, mercantiles, civiles, ambientales y otros, un poder tan amplio como para enajenar a su nombre sus propiedades.  

Asi mismo, seria el albacea y mentor de sus hijos, hasta que estos cumpliesen veintiún años y pudieran asumir el pleno derecho de sus propiedades. 

Dada esta hipótesis , que puede ser un tanto extrema, pero que no está alejada de la realidad y para el ejercicio de este documento, igual y usted por alguna circunstancia tiene que darle responsabilidades gerenciales a algún subordinado y tiene que decidir entre cuatro candidatos , sin posibilidad alguna de no llegar a una determinación e inclusive tiene un plazo fatal. 

¿A quién escogería? 

A un amigo o compadre buen mozo, sociable, que se viste, calza y peina de manera impecable, casado con una bella mujer, famosa en el medio social y en la farándula, esto producto de un segundo matrimonio, del primero se sospecha que  mató a su esposa aunque nunca se probó nada y que por lo menos tiene un hijo fuera de matrimonio de quien no se ha responsabilizado. 

Es muy habilidoso para los negocios, aunque trinquitero, con amigos de dudosa reputación, uno incluso jefe máximo, que en el pasado reciente quebró una gran empresa por su incapacidad y ambición personal. 

Este compadre o amigo usted lo quiere y estima mucho, le ha echado la mano cuando se ha requerido, pero usted bien sabe, en esas noches de bohemia que la lengua se le ha soltado, que le gusta la lana fácil y que no se tentaría el corazón para hacerse de un peso que no es suyo, pero eso si, usted lo estima mucho y cree que el también y asume que con usted será derecho. 

Y para finalizar, su preparación académica es de dudosa calidad, y su experiencia tan sólo fue de seis años en una empresa menor y su desempeño fue mediocre para algunos, de resultados para sus amigos. 

Tiene otra opción en un recomendado muy rollero, con experiencia, con ideología socialista descafeinada, que promete y promete pero no dice los cómos y usted tiene temor de que reparta, ceda o venda propiedades y la propia empresa para entregarlas a causas no productivas y conoce una amistad de él , que vive en el sur, que puso de cabeza una empresa del sector petrolero por ser popular con su gente ya que es de idea comunistoide. 

La tercer opción es un Doctor, buena gente, simpático, fresco, pero que no tiene experiencia alguna en los negocios y adicional a ello usted bien sabe que es prestanombres y testaferro de una profesora revoltosa que con seguridad se quedaría con su negocio, propiedades y bienes. 

Su cuarta opción es una dama conservadora, de carácter afable pero duro, exigente con sus colaboradores, de edad madura pero con la jovialidad suficiente para enfrentar los retos, con amplia experiencia en su negocio, tiene doce años colaborando y está probada.   

Vive acorde a sus ingresos, no se le ha sabido nunca de algún negocio fuera de la ley, tiene una familia sólida, integrada, de principios éticos y religiosos adoptados por su buena educación y reafirmados en su paso por el sindicato empresarial más importante del país. 

Es economista, título que recibió de una prestigiada universidad, con amplia experiencia, conoce el mercado integralmente, pero su única duda es que por ser mujer no la respeten los mandos inferiores. 

Estimado lector, a cuál de estos cuatro aspirantes le daría usted la responsabilidad de velar por la educación de sus hijos y de cuidar el patrimonio personal. ¿A quien de los cuatro pondría al frente de su reconocida y eficiente empresa, a quien le daría la confianza para representarlo en lo personal?  

¿A quien de estos candidatos le daría la responsabilidad que a usted le permitiera vivir en tranquilidad  y seguro de que su patrimonio este asegurado?