Periodico Digital el Cuerudo de Tamaulipas

Desde Nuevo Laredo:
La Columna Política de Carlos Domínguez

PD.- MULTIMEDIOS INSISTE EN PUBLICITAR A PERVERTIDO COLOMBIANO ESTAFADOR

EL PRI ANHELA VOLVER A LOS GOBIERNOS DE TOMAS YARRINGTON RUVALCABA, EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES Y EGIDIO TORRE CANTÚ

PD.- Pese a tratarse de una irrefutable estafa, la televisora Multimedios insiste en publicitar las actividades de un pervertido colombiano estafador que se hace llamar “Isaías de la fe”. Este sujeto afirma ser un enviado de Jesús a Nuevo Laredo, con poderes sobrenaturales para curar cualquier clase de enfermedad física o mental, expulsar demonios y obtener la libertad de gente presa sin importar cuáles hayan sido los delitos cometidos.
En horario nocturno Multimedios colabora con este mentiroso sujeto difundiendo un pernicioso programa destinado a esquilmar gente inocente. Dicha televisora parece estar en bancarrota, sin embargo no cesa en sus objetivos de obtener dinero en forma por demás denigrante.

EL PRI ANHELA VOLVER A LOS GOBIERNOS DE TOMAS YARRINGTON RUVALCABA, EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES Y EGIDIO TORRE CANTÚ
Con un cinismo que colma la paciencia de sus oyentes, el presidente del PRI en Tamaulipas, Sergio Guajardo Maldonado, pregona por toda la entidad que los gobiernos de Manuel Cavazos Lerma, Tomás Yarrington Ruvalcaba, Eugenio Hernández Flores y Egidio Torre Cantú fueron ejemplares en materia de justicia, progreso económico y tranquilidad social.

Encontrando eco en un sector del periodismo escrito y radiofónico que recibió incomparables prebendas económicos durante más de 20 años, el dirigente estatal del partido tricolor sostiene que la violencia actual que sufre Tamaulipas es culpa del gobierno panista asumido hace casi 13 meses.

Usando un discurso lleno de alabanzas a su partido político, el líder estatal priista no cesa de afirmar que a los tamaulipecos les conviene regresar al pasado, es decir volver a ser gobernados por el PRI con mandatarios al estilo de los anteriores cuatro sexenios.

Para Sergio Guajardo los tres últimos gobernadores priistas han sido los mejores que ha tenido Tamaulipas en toda su historia. Sólo le falta decir que Yarrington Ruvalcaba y Hernández Flores están presos injustamente, y que son inocentes de asociación con el narcotráfico y peculado, delitos que se les imputan y por los cuales están siendo reclamados por el gobierno de los Estados Unidos.

Según Sergio Guajardo y su pequeño grupo de acompañantes miembros del comité directivo estatal del PRI, la violencia y el derrumbe económico aparecieron en territorio tamaulipeco el día primero de octubre del año pasado, justo desde el momento en que Francisco García Cabeza de Vaca protestó como gobernador constitucional de Tamaulipas.

Tan audaces comentarios vertidos por el presidente estatal tricolor, han resultado difundidos por medios informativos impresos y radiodifusoras que durante más de dos décadas recibieron cantidades estratosféricas de dinero a cambio de señalar todos los días que en Tamaulipas “no pasa nada malo”.

Manuel Cavazos Lerma fue el primero en negociar con la delincuencia organizada dedicada en aquellos años exclusivamente al narcotráfico. Con Tomás Yarrington el sector gubernamental encargado de la seguridad pública incluyendo a la policía ministerial se sumó a la delincuencia organizada, agregando sus propias actividades de secuestro y sicariato.

Eugenio Hernández Flores mantuvo todos los lazos delictivos dejados por sus dos antecesores, mientras que Egidio Torre Cantú se convirtió en un capo más de la delincuencia organizada, dedicados ambos en sus respectivos mandatos a saquear el erario estatal indiscriminadamente, tal como lo hicieron Manuel Cavazos Lerma y Tomás Yarrington Ruvalcaba.

De hecho, no existe manera de ocultar la culpa de los gobiernos priistas que engendraron el remolino de violencia y sangre que siguen azotando a Tamaulipas.

Los dichos de Sergio Guajardo suenan burlones en los oídos de la ciudadanía. Exonerar a los últimos tres gobernadores priistas de sus crímenes, y atribuir la responsabilidad de lo ocurrido en Tamaulipas al actual mandatario panista, es un agravio social, más que político.

Los priistas de corazón ajenos a la burda mentalidad de sus líderes estatales, deben estas conscientes de la realidad, pues las mentiras expresadas por el presidente estatal priista van dirigidas a estos sinceros militantes del PRI, con la intención de convencerlos y dirigirlos al abismo de siempre, en beneficio de la élite de sinvergüenzas que sobreviven a la perversidad de los exgobernadores del partido tricolor. ¿O no?

Por hoy es todo, pero mañana estaremos nuevamente en estos espacios de las redes sociales, Dios mediante.

CDR.
Periodismo Independiente.