martes, 8 de septiembre de 2020

SADER

 

¿Brincan, saltan, vuelan? Me los llevo para la cazuela

El consumo de insectos para alimentación se conoce como entomofagia, es una práctica ancestral alrededor del mundo y una deliciosa tradición en México.

escamoles

Por:Staff La Cajeta Política Rural de México.

En nuestro país, desde la época prehispánica se aprovechan un sinfín de especies, gracias a la enorme biodiversidad con la que contamos, sin embargo, resulta muy importante resaltar que la ingesta de insectos se asocia directamente con ciertos aspectos: son especies de poblaciones muy elevada, cuya localización y recolección son simples y su presencia, aunque intermitente, es constante.

Así, encontramos que los insectos más consumidos son los denominados: sociales, como abejas, hormigas, avispas y termitas, los que presentan algún gregarismo: chapulines, chinches y mariposas, así como otras que se desarrollan en conjunto, tal es el caso de diversas variedades de gusanos.

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Es muy importante reconocer que los insectos comestibles contribuyen a la seguridad alimentaria porque están en todas partes, se reproducen rápidamente y poseen tasas elevadas de crecimiento, además de un reducido impacto ambiental durante su ciclo de vida. Son nutritivos, ya que contienen niveles elevados de proteínas, grasas y minerales, pueden criarse aprovechando diversos flujos de residuos,.Además, pueden consumirse enteros o molidos, en forma de polvo o pasta, e incorporarse a otros alimentos.

Un aspecto importante en el tema de la entomofagia es la conservación del valor cultural y el reconocimiento del lugar de origen de un producto, este permitirá la subsistencia y posterior aprovechamiento, es decir, es muy importantes que se establezcan las bases de reproducción de una especie que tenga gran demanda en el mercado gastronómico, y que con el paso del tiempo pueda impulsar el desarrollo local de las regiones donde se produzca.

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Entre los aztecas era tal la importancia que tenía la hormiga productora de escamoles (sus huevos), que había cantos y danzas dedicados a ellas. La abeja silvestre que elabora la cera de Campeche, también conocida como abeja alazana o melipona, era objeto de culto de los mayas, para quienes era una divinidad adorada; la miel de esta abeja tiene buen sabor y es más húmeda que la común.

Oaxaca, es uno de los estados donde se consume el mayor número de insectos como la avispa comestible, gusano del madroño, hormigas y varias especies de chapulines. Otros estados que también tienen arraigada esta tradición son Guerrero, Morelos, Hidalgo y Chiapas, pero también Campeche, Tabasco, Puebla, Querétaro, Guanajuato, Jalisco y Michoacán, reportan variados consumos.

Con antenas, patas o alas, que camine, se arrastre o vuele, usted… ¿cuál prefiere?

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[1] Tomado de Ramos-Elorduy, 1999 en https://tinyurl.com/y4dcn4ox

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